lunes, 5 de mayo de 2014

Magia. Por Destellos de inocencia


Caía la media noche cuando los fuegos artificiales surcaban el cielo en medio de la ciudad. Hacía un poco de viento, pero tan sólo era la suave brisa del mar impregnando de oxígeno mis pulmones.

 Alex, me rodeó con sus suaves manos de terciopelo la cintura, aquello me estremeció. Aun no me acostumbraba a un ser tan perfecto y tan mágico cómo él. Me palpaba la barriga, y este magnifico ser que llevaba dentro lo notaba, cuando lo hacía no dejaba de darme patadas. Él estaba preparado, sería buen padre, y yo era feliz, por saber que un ser como aquel me quería tanto como para confiar en mí. Ambos sabíamos que sería difícil, no todos los días nacía un ser tan poderoso y especial y debíamos tener cuidado, pero no me preocupaba, le quería demasiado como para no ser valiente ahora.
Ya lo estaba notando... algo dentro de mí había cambiado, era el momento. Teníamos que irnos de aquí. Alex cogió el gran bolso que habíamos preparado con comida y la maleta con nuestra ropa, y salimos por la ventana de la terraza, me envolvió entre sus brazos justo antes de desplegar las alas, la cuenta atrás había empezado. No tardamos mucho en llegar a las entrañas del bosque, allí, dentro de aquel gran árbol abandonado, nacería nuestro hijo. Lo decidimos hace meses, allí, estaríamos a salvo. No mucho tiempo después miles de hadas luminosas nos rodeaban, haciendo casi invisible nuestro rastro, ellas creaban un manto protector invisible que nos acompañaría durante unos días.

El momento llegó pronto, no disponíamos de hospitales, aunque gracias a dios sí de la magia del universo. Después de tres horas, y casi morir del dolor, el pequeño Baruch, ya había nacido. Tenía los ojos avellana como yo, y el pelo rubio como su padre. Su pequeña incisión en la parte de arriba de la espalda, por donde algún día le nacerían las alas le hacían especial, al igual que una mezcla de todos los poderes de las ninfas y los ángeles. No tardamos mucho en darnos cuenta de esto, los animalillos del bosque no tardaron en venir y conocer al nuevo Dios.

Durante tres días estuvimos allí, luego tuvimos que irnos, las criaturas mágicas del mundo no estaban acostumbradas a tales nacimientos, y quizá Baruch había hecho un cambio en la genética del universo. Nunca antes había nacido un ser mitad ángel, mitad ninfa, de echo hasta este momento no había podido nacer ningún ser mágico que no procediera de dos padres de la misma ''raza''.

Durante años, estuvimos escapando de todas las razas de seres vivos que habitaban la tierra, durante años protegiendo nuestra familia, enseñando a nuestro hijo cómo usar bien sus poderes, a pelear, a luchar. Alex era uno de los ángeles más altos, hasta que cuando nuestro amor sembró a Baruch le expulsaron del cielo. Yo princesa de las ninfas había tenido un poco más de suerte, al estar la naturaleza de mi parte. Había muchas criaturas que nos admiraban, otras, deseaban nuestra muerte y la de nuestro hijo. Tarde o temprano tendríamos que pelear, pero cuando ello sucedió, estábamos preparados.

Baruch acababa de cumplir los 20 años en medio de una casa en un lago, Alex y yo, junto con algunos seres del bosque que nos habían ayudado desde que nació vinieron a celebrarlo con nosotros, Baruch fue a meditar, justo en la colina que quedaba al lado del lago cuando se dio cuenta, la batalla había empezado. Varios ángeles con las alas grandes y largas nos habían encontrado, los agentes del cielo, habían aparecido.
Las nubes se volvieron negras, el azul del lago cambió a gris, Alex estaba nervioso, un brillo en sus ojos había cambiado, sabíamos que estábamos destinados a morir, pero no teníamos miedo por nosotros, si no por Baruch, sabíamos que estaba preparado para la batalla, pero..¿qué le depararía después?

Diez largos días estuvo el mundo en silencio, diez dias que duró la guerra, Alex murió, yo también, pero el universo ganó, y alzó a Baruch cómo ser más especial, como Rey del mundo, de la tierra, de los ángeles, del amor y la felicidad.


Por destellos de inocencia, escritora y lectora compulsiva del club literario vidas de tinta y papel.
 

2 comentarios:

  1. Acabo de leer el relato y... WOW. Ole tu!!!! Es precioso, me encanta! No me esperaba ese final... :/

    Besitoos<3

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    Respuestas
    1. muchas gracias! no creía que iba a gustar tanto! :) besitooos.

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